Una intensidad emocional absoluta de lo que anhelas combinada con cero expectativas a que se manifieste, un desapego incondicional. Este es el estado de balance interior que posibilita que la magia de la creación.
Cuánto más fuerte se mueva el péndulo hacía un lado de tu capacidad creadora, y luego también le permites hacer lo mismo hacía el otro lado, mejor saldrá tu creación. En otras palabras:
– cuanto más intenso sea tu foco, tu intención, tu energía & tu acción y
– cuanto más profundo sea tu desapego & tu estado de receptividad,
– menos esfuerzo necesitarás para dar luz a tu manifestación.
Mientras que existan algunas creencias desfavorables, la acción sigue siendo muy necesaria, la no resistencia a la dedicación, el trabajo, la perseverancia es una de las virtudes a emplear en este proceso.
¡Me encantaría que jugases con esta propuesta y me cuentes cómo te funciona!